el instituto Santa Teresa en el norte de castilla
Desvalijan el antiguo instituto Santa Teresa destinado a Escuela de Arte
La falta de presupuesto deja en el aire la reforma pese a que el proyecto lleva listo un año
Artículo públicado en el Norte de Castilla 07.07.12 J. SANZ | VALLADOLID
Cada día que pasa aumenta el dinero que costará en su momento ...
Desvalijan el antiguo instituto Santa Teresa destinado a Escuela de Arte
La falta de presupuesto deja en el aire la reforma pese a que el proyecto lleva listo un año
Artículo públicado en el Norte de Castilla 07.07.12 J. SANZ | VALLADOLID
Cada día que pasa aumenta el dinero que costará en su momento, si es que llega, la reforma del malogrado Instituto Santa Teresa de Jesús, el centro educativo más veterano de La Rondilla hasta su cierre hace ya tres largos cursos. Nadie había vuelto a pisar sus aulas desde entonces hasta que hace unas semanas recibió la siempre indeseable visita de los ladrones de chatarra. Lo tuvieron bastante fácil para entrar ante la ausencia de vigilancia en este inmueble, propiedad de la Consejería de Educación, y más aún para llevarse la instalación eléctrica al completo y un buen número de radiadores.
Lo ocurrido llevó a la Dirección Provincial de Educación a ordenar el tapiado de las puertas reventadas por los delincuentes y el cierre, con un simple candado, de la reja de entrada al patio por la calle Mirabel. Tampoco es que sea demasiado complicado acceder ahora a las instalaciones, pero al menos es necesario saltar la valla. De las facilidades para entrar dan fe las pintadas que decoran la fachada del edificio de ladrillo levantado en 1979 y las ventanas destrozadas a pedradas.
Así que poco o nada queda ya de valor en el interior de un instituto que en su día llegó a ostentar la fama de ser uno de los duros de la ciudad y que fue perdiendo caché durante su progresivo abandono hasta dejarlo con apenas un centenar de alumnos –llegó a rozar el millar– en el último curso (2008-2009) en el que estuvo en servicio.
Poblado de malas hierbas
Las manifestaciones de padres, alumnos y profesores no pudieron evitar que cerrara sus puertas en junio de hace tres años con la promesa de que sería sometido a una reforma para trasladar allí la Escuela de Arte de la calle Leopoldo Cano. La Consejería de Educación llegó a presupuestar una partida de algo más de ocho millones de euros el año pasado para poner en marcha la rehabilitación del veterano edificio y la construcción, incluso, de un bloque nuevo en el patio en un plazo de tres años. Pero de aquella partida solo se utilizó una partida menor de apenas 150.000 euros destinada a la redacción de un proyecto que lleva un año realizado. Las obras, que debían estar listas en 2013, nunca comenzaron.
Así lo reconocieron este viernes fuentes de la Dirección Provincial de Educación: «El proyecto para la nueva Escuela de Arte está redactado y la idea continúa siendo ejecutarlo, aunque ahora mismo carece de dotación presupuestaria y no podemos poner una fecha para las obras».
Y mientras se toma la decisión por parte de la consejería, algo que las fuentes consultadas no creen que ocurra «a corto plazo», el viejo instituto continúa su imparable proceso de deterioro no solo por la acción de los delincuente sino también por la falta de mantenimiento, que hace que su patio esté en la actualidad cubierto de malas hierbas.
El portavoz de la Asociación Vecinal Rondilla, Miguel Ángel Niño, recuerda cómo la directora provincial de Educación, Araceli Valdés, les dijo hace tres años que no se preocuparan y lamenta que «ahora está muerto de risa y tememos que pueda acabar como el colegio San Juan de la Cruz –situado a apenas quinientos metros y que lleva doce años cerrado–». La agrupación espera desde finales de junio una reunión con ella para tratar el caso.
Cierre del centro social de la calle Olmo
Por otra parte, el anunciado cierre de las instalaciones del centro social de la calle Olmo, situado en la barriada de XXV Años de Paz de La Rondilla, será una realidad en las próximas semanas. Así lo anunció el Ayuntamiento hace unos meses y ahora, por fin, parece que va a ser una realidad. Las dos asociaciones –de mujeres y de jubilados– que tenían allí su sede se trasladarán al centro cívico y el ciberaula de La Caixa se mudará, en principio, al colegio León Felipe.
La medida, aunque sabida, volvió a desatar las críticas de los vecinos y del grupo municipal del PSOE. Los primeros, en palabras de su portavoz, Miguel Ángel Niño, lamentan que con este cierre serán «tres los edificios abandonados en el barrio con el colegio San Juan de la Cruz y el instituto Santa Teresa de Jesús». Lo mismo considera el concejal socialista Luis Vélez, que vaticina «un problema de seguridad y sanitario» en el inmueble similar a los anteriores.
Fuentes municipales insistieron en que la decisión obedece al mal estado del edificio –propiedad de la Junta–, que se vio agravado a raíz de la tromba de agua del 31 de mayo del año pasado, y explicaron que el cierre definitivo se producirá en cuanto se trasladen los servicios que se prestan en el centro.